Si estás usando Internet Explorer, es posible que no puedas ver los enlaces en el lateral izquierdo. Cambia a Mozilla Firefox o cualquier otro navegador y podras ver la página correctamente.

martes, 10 de mayo de 2011

EL CAMPAMENTO INGLÉS EN MASPALOMÁS EN EL AÑO DE 1797

La Charca y las dunas, primera mitad s. XX. Fuente: Fondo de Fotografía Histórica de la FEDAC

Felipe Enrique Martín Santiago.
Historiador. Licenciado Geografía e Historia, Universidad de La Laguna,
Profesor y Miembro del Centro de Interpretación e Investigación Etnográfica e Histórica del CEO Tunte.

Dentro del plan del Almirante Nelson para apoderarse del Archipiélago, junto con el ataque de la escuadra inglesa al puerto de Santa Cruz de Tenerife, parte de la flota del Reino Unido, fondeando en la playa de Maspalomas, constituyeron un campamento militar con el claro objetivo del control y ataque a todo navío enemigo.

Junto con la hipótesis del origen de la toponimia de la playa del Inglés, ligado a la familia García del Castillo, con ingenio en Gran Canaria durante el siglo XVI, que por lazos matrimoniales aportaron a la toponimia de Telde el apellido Inglés (Juan Inglés).

No debemos descartar la presencia del campamento británico de 1797 como origen de la toponimia de la playa del Inglés.

En esa coyuntura internacional, con el apoyo de Carlos IV de España a la Francia napoleónica, se contextualiza esta historia. El 20 de julio de 1797, un escuadrón británico al mando del contralmirante Horacio Nelson se presentó frente a Santa Cruz de Tenerife. Tres días más tarde, el 25 de julio de 1797, fueron derrotados, tomando nuevos rumbos la flota británica.

La Charca y Oasis. Fuente: Fondo de Fotografía Histórica de la FEDAC.

Apéndice Documental

“En este día, 24 de abril de 1797, se extendió la voz que había saltado los ingleses por Maspalomas y habían formado campo, a cuyo aviso fueron varios oficiales de esta ciudad a unirse con sus compañías en Telde.”

En este día, 25 de abril de 1797, se corrió la voz que el inglés se cogió el barco Santo Domingo de don Domingo Suárez y el barco de La Vera Cruz de Antonio Melián
...
En este día, 2 de mayo de 1797, me prestó el Viato Francisco Carme media fanega de gofio para pagársela en el tiempo de la cosecha, y al día siguiente, día de la santísima Cruz, les dí de comer a 27 palmeros que era la compañía del barco del Gallito, que los había prisionado el inglés en la guerra de este año 1797, y los cogió el día sábado 29 de abril de dicho año 1797, sobre los puertos de Ganiguin y Maspalomas, en cuyo día les dí de almorzar y comer una comida de pan y otra de gofio, carne y demás.
En este día, viernes, 12 de mayo de 1797, a las cinco de la tarde aprisionó por enfrente de la Carnicería, poco más o menos, más alto o bajo una fragata inglesa que asomó por la Punta, sería como cosa de las tres de dicha tarde, al barco de la Galinda San Caethano, que estaba barloventiando para montar la Punta y pasar a la Resifia a fondearlo en el Charco, cuyo fragata solo le tiró un pedrero con bala sin tirarle hacer daño, para que arriara la bandera española que había echado el dicho San Caethano, y en aquella misma noche hizo echar la lancha en tierra del san Caethano con el contramaestre. A Morales y tres hombres más que le diesen un refresco, ofreciendo dar el barco a Roquito Gre que se hallaba prisionero, por haber estado a bordo de dicho Caethano. Este dieron fuego al barco y echaron a Roquito y a la demás gente en tierra el día 18 de mayo, que llegaron a la ciudad por haberles echado el día antes, 17 de dicho mayo.

Oasis y las dunas, primera mitad s. XX. Fuente: Fondo de Fotografía Histórica de la FEDAC

En este día, 1º dicho (septiembre), a la tarde, viernes, se aparecieron tres navíos ingleses, dándole caza a una fragata francesa que venía cargada de América de varios efectos, cuya cargazón declarado por su tripulación, que se componía de 80 personas, ascendía a 9 millones de pesetas, que son en pesos dos millones y medio a corta diferencia. Esta le vinieron dando caza todo el día hasta las cuatro de la tarde, que por la parte del Confital se entró hasta la Punta de la barra, donde dio fondo. Y hasta allí le siguieron los buques ingleses haciéndole fuego. Y, sin embargo, que el castillo de Cabrón hizo fuego y el del puerto lo mismo, nada se consiguió a causa del mucho fuego que hizo la una [sic] de los navíos ingleses, porque a las cinco y media de la tarde se abordaron a ella varios lanchones y se la sacaron picándole los cables y se la llevaron, sin embargo, de haberse echado en tierra parte de la tripulación, como serían cincuenta hombres, quedando los demás a su bordo.”

Fuente: Los Cuadernos del Comerciante de la Calle de la peregrina don Antonio Betancourt (1796-1807). Introducción y estudio de don Antonio de Bethencourt Massieu. Transcripción de Aurina Rodríguez Galindo. Ediciones del cabildo Insular de Gran Canaria. 1996.